El Gordo es grande y difícil de esconder y aún así está velado tras un aire de mitología y leyenda. Algunos dicen que el estilo se originó bajo los designios estelares de Capricornio. Otros cuentan que se trata del producto de un duelo cervecero entre un caballero del norte y un cervecero de Baviera. Y también existen los que dicen que esta cervezota es el resultado de una limpia de ingredientes en una cervecería. Nosotros simplemente decimos: “No temas al Gordo”.

La cerveza Bock celebra la malta, después de todo, es la malta la que provee a la levadura con los azucares que convierte en alcohol. Nuestra receta utiliza malta clásica alemana tipo Pils y la junta con la elegancia de la malta vienesa para presentarle un complejo bouquet de melanoides y notas tostadas combinadas con su dulzor acaramelado. Siendo una cerveza a base de malta, la bock es fermentada con poco lúpulo de origen, el cual es agregado sólo para equilibrar su sabor y frescura. La levadura para lager es fermentada a temperaturas más bajas que la de un ale, lo que le da una impresionante frescura. No le tema al Guladón, le iluminará su corazón.